El anciano se tambaleó. Por un momento, sentía que iba a desvanecerse en el acto.La razón por la que había dejado atrás su alma fragmentada era para aceptar nuevos estudiantes y transmitir su arte secreto a las generaciones siguientes, ¡no para reconocer a otras personas como su maestro!
Sin embargo, no sólo falló al reclutar a su estudiante, sino que la otra parte incluso tenía la intención de tomarlo como estudiante. La inmensa frustración que sintió lo dejó con la sensación de que iba a explotar en el acto.
Pero pensando en el pasado, él fue la persona que dijo: "Si quieres obtener mi herencia, tienes que unirte a mi linaje. De lo contrario, ¿cómo puedo impartirte mi arte secreto?"
Ahora que quería que la otra parte le impartiera la versión perfeccionadadel Viajero Sin Límites, no era necesario decir que las mismas reglas deberían aplicarse también. ¿Por qué la otra parte debería enseñarle lo contrario?
